Bueno, vamos a darle caña a esto. No es que haya hecho nada nuevo hoy, pero tengo demasiadas cosas/problemas en mi cabeza. Puede que para muchos, no sean más que asuntos diarios que vais resolviendo sin problema y casi por inercia, pero para mí, todo va aumentando en mi cabeza.
Otro motivo de este blog es mi incredulidad a este mundo social que me ha tocado vivir. Las personas no se interesan lo más mínimo por el ser ajeno y cada vez parece más una jungla: "sálvese quien pueda".
Sin ir muy lejos, me parece de muy mal gusto un hecho que me ha sucedido estos días y que voy a dejar como recuerdo para los años de los años, amén.
Un coleguilla será papá y comenté, por grupo de wassap abierto a tal evento, que podríamos ir pensando en hacer un regalo, pues en estos casos, mientras más te vayan regalando, mejor, pues bastantes gastos comportan estas cosas criaturas.
Decidimos que sí y se me ocurrió la gilipollez brillante idea de proponer que yo disponía de cosas a donar para bebés, les preguntaba si les interesaban ciertas/supuestas cosas de las cuales yo disponía y así nos presentábamos con un regalo que sabíamos que le podía ir bien. Empiezo a intercambiar mensajes con el futuro papá y acabo sabiendo de "algo" que le iría bien. Monto todo el dispositivo y a él le aseguro que no se lo tiene que comprar que yo se lo llevo.
Automáticamente, se lo comento a una del grupo, le parece bien pero que lo vaya a comprar yo. Cuando ya lo tengo todo casi arreglado y después de que el futuro padre está esperando el accesorio, me dicen que mejor dejarlo para más adelante, para cuando ya hayan nacido las criaturas. Les comento que lo están esperando y que si es necesario, ya se lo regalo yo, por mi parte, pues COMO YA LES DIJE, lo necesitaban antes, no después. Unas dicen que sí, otras que no y al final quedamos que sí y el lunes para entregarle el regalo.
Él ya está avisado de que voy a ir y no "sospecha" nada.
El mismo día o el día antes, ahora no lo recuerdo, me dicen que no podemos quedar, que cambiemos el día. Yo hablo con el futuro papá pero no se me ocurren más excusas pues como yo le ponía pegas para ir a su casa, él me decía que en 10 minutos estaban en mi casa y recogían las cosas. No les podía dejar venir a recoger las cosas pues entonces faltaría el regalo común y no sabría qué decirle. Al final, se sorprende de que le diga a todo que no y que quedamos para otro día y al final, le comento que es que le queremos llevar una cosa de parte de todos y por eso le estaba dando largas. Entonces, le convenzo para quedar otro día de la semana siguiente, a lo que accede sin problema. Una parte de la sorpresa, ya se había jodido... para variar!
Sábado por la mañana (cinco días después de haber quedado), me encuentro un mensaje en el grupo del wassap que una de las muchachas no se acordaba que tenía un "evento" que no podía dejar y que cambiemos de nuevo el día (por tercera vez). De la mala ostia que me entra, ni contesto, esperando a ver qué decían el resto.
El resto, pues una no podía el día que decía, el miércoles no podía yo, otra nunca sabe si podrá estar o no.... vamos un desastre. Al final les digo los días que estoy disponible y que si tan importante era el "evento" como para fastidiar el día de la quedada. Me comenta que sí que es importante pero no me dice el qué. Os diré un secreto: es una actividad del gimnasio. Está claro que es mejor la actividad del gimnasio que ir a entregar el regalo a un amigo...lamentable.
Al final acaba diciendo que como es imposible volver a quedar, que vayamos sin ella. Perfecto! Una que no viene porque va a un "evento" "muy importante", otra que "no sabe si estará disponible" y otra que no dice que sí que iría pero tampoco dice nada, pues todo lo dice la primera en nombre del resto. ¿Os podéis imaginar? Grupo de 4 en el cual hablaba yo y otra persona que hablaba en su nombre y en el nombre de las otras dos. Mujeres!! Luego dicen de los hombres.
¿Cómo acabará la cosa? Pues fatal. Mañana es el día que hemos quedado. Os puedo asegurar que mañana nadie dirá nada y me veré más solo que un fuet colgado en una charcutería. Está claro que esto no acabará bien, pues me dará un pronto de esos que me dan y quedaré mal. ¿Porqué quedaré mal? Pues porque eres el tonto del bote al que todos se piensan que pueden marear. Cuando el tonto del bote hace lo mismo que hace el resto, entonces se ponen furiosos. Pues a la mierda!!
Este futuro papá está a punto de cumplir. Necesita todo lo que necesitan sus hijos (vienen dos) y por más que les he dicho a estas mujeres que los padres están de los nervios, van a la suya y no piensan en que él está nervioso. Todas van a su rollo. Mañana no sé lo que haré. Cuando llegue la hora, yo sé que nadie enviará ningún mensaje y si lo envían, yo creo que ya estaré en casa de él entregando mis cosas. ¿Le entregaré el regalo conjunto (el cual he comprado yo, también..)? Pues no sé. Mi pronto dirá lo que voy a hacer. Mañana, la segunda parte.
Jorge Dexter
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